Emergió la voz allá en los albores de la mentira,
una bóveda ficcional,
corrientes submarinas
recorrían aceradas mi cuerpo, bañando bajo los élitros
las alas auténticas, divinas, purpúreas, escarchadas como el hueso.
Mi cuerpo llenó cada centímetro cúbico con la ausencia sublime que
cerca y engulle gélidamente el vuelo intratable de la cera;
la corteza del árbol donde los muchachos se masturban,
los muslos inacabados, aquellos primeros muslos de piel trémula y clara,
la vejez que aguarda con dientes sintéticos el ósculo sabor a terracotas
llamaron por igual a mi cuerpo, mi cuerpo ungido por el viento;
luces que oscilan, tibias, en el interior de mis pupilas engañándome,
haciéndome pensar que son naves fenicias y no speed lo que surca mi boca.
Ni todos los azules
aparentemente inmunes en el horizonte.
Todo este derroche de amor y vergüenza se dilatará en la vida cotidiana
como un escupitajo a las puertas del cielo
o un insecto que describa su curva electrónica
en las orillas invisibles de la espada.
recorrían aceradas mi cuerpo, bañando bajo los élitros
las alas auténticas, divinas, purpúreas, escarchadas como el hueso.
Mi cuerpo llenó cada centímetro cúbico con la ausencia sublime que
cerca y engulle gélidamente el vuelo intratable de la cera;
la corteza del árbol donde los muchachos se masturban,
los muslos inacabados, aquellos primeros muslos de piel trémula y clara,
la vejez que aguarda con dientes sintéticos el ósculo sabor a terracotas
llamaron por igual a mi cuerpo, mi cuerpo ungido por el viento;
luces que oscilan, tibias, en el interior de mis pupilas engañándome,
haciéndome pensar que son naves fenicias y no speed lo que surca mi boca.
Ni todos los azules
aparentemente inmunes en el horizonte.
Todo este derroche de amor y vergüenza se dilatará en la vida cotidiana
como un escupitajo a las puertas del cielo
o un insecto que describa su curva electrónica
en las orillas invisibles de la espada.
Labels: movimientos:perpetuos