"Les recherches hystériques"

Ni siquiera me dieron tiempo a cerrar la puerta y ya se arrebataron los cuerpos sudorosos, los unos sobre los otros como en pilas. Asomó un fuerte olor a genitales. Soporté estoicamente los besos tripartitos con gusto amargo. Un cristal se rompió estruendosamente en el baño. Intenté callar unos gemidos con la rigidez represiva de mi dedo índice, temiendo la condena de los vecinos; poco caso me hicieron. Escuché una discusión por lo bajo, y entonces, en un lapso de tiempo elidido aparecieron condones usados diseminados en el suelo como fractales. En realidad fué solo un deux ex máchina más disfrazado de libre albedrío; no soy responsable por los actos de los demás, ni tampoco por los míos. Sería capaz de entregarme a esta especie de delirio, pero los Idus de Marzo hoy estan demasiado cerca. Elijo adoptar la constricción, en una actitud contemplativa que mucho y poco tiene de pasmoso. ¿Las claves? Mañana quiza, a la hora de la siesta.
<< Home